MARTA DÍAZ PETENATTI
(Elortondo, Argentina - )
Marta Díaz Petenatti nació y vive en Elortondo, Pcia. de Santa Fe, República Argentina.
Estudios:
–Maestra Normal Nacional
–Perito Mercantil Nacional
–Profesora en Ciencias Económicas.
– Psicografóloga.
Se desempeña como Juez Comunal dentro del Poder Judicial de su provincia y dicta Horas Cátedras en 5to. Año Escuela de Enseñanza Media.
Publicó un libro de Contabilidad Teórico–Práctico para Quinto año de Escuelas de Enseñanza Media y recientemente (2010) otro cuya temática es Poemas, Narrativas y Leyendas siendo su nombre: “Mirada de Mujer”.
–Participó en 15 Antologías colectivas, nacionales e internacionales.
–Colabora con medios Gráficos, Virtuales y Radiales de su país y de distintos países del mundo.
Obtuvo premios y distinciones de honor de carácter Nacional e Internacional:
–III Corcurso Internacional de Poesía y Narrativa Digital “Uniendo Fronteras” el 26–11–2011– Género Narrativa– 8 ava. Mención Especial.
–Felicitaciones del Instituto Cultural Latinoamericano de Junín, Pcia.de Bs.As.–Argentina.
–Constancia Puesto de Narrativa Premiada.
–Mención de Honor en Colombia en “Los poetas de Iberoamérica” en el concurso Anual de Poesía 2010.
–Poema “Mi Inocencia”, seleccionado para ser leído en Quito, en la Radio Municipal del Gobierno de Ecuador.
–Está invitada al Stand de la Pcia. de Santa Fe para la Feria del Libro a realizarse en la ciudad de Buenos Aires para llevar su libro impreso Mirada de Mujer y material sin editar y también a la Feria Internacional del Libro, en el stand de la Rep. Argentina, en Puerto Rico, también con su libro, y con poemas y narrativas en formato de tarjetas personales para obsequiarlos entre los participantes.
JACARANDÁ
MI INOCENCIA
He perdido la inocencia ante tu instinto
que te llevara a sondear por mis caminos
recorriendo sus recodos y sus ríos
y almorzando en mis manjares y mis vinos.
He perdido mi inocencia ante tus ansias
imperantes de placeres conocidos,
que tomaron como tuyos mis anhelos
transformando en pasión lo maldecido.
Te erigiste como el hombre dominante
en el juego de una vida que empezaba,
saboreando el placer del caminante.
Y te erguiste ante el sueño complacido
de lujurias, ansias locas y favores,
soberano de la angustia y lo venido.
Te maldigo pues entonces por mi vida,
por mi afán, mi ilusión y mi demencia,
pues lograste que hace mucho, mucho tiempo,
transformaras en angustias mi inocencia.
COMPARTIENDO
Te invito con un mate amiga mía
a tratar de olvidar nuestros dolores.
Que esta infusión dulzona compartida
ayude a amenguar nuestros temores.
La vida ha sido dura con nosotras,
no tuvimos instantes de alegrías,
recorrimos caminos muy sinuosos
y siempre fue frustrante la subida.
Nuestros soplos de vida fueron cortos,
el tiempo nos ganaba la partida
mojándonos los ojos en silencio
y tratando de impedirnos la huída.
Hoy volvimos al lugar exacto
donde un día aprendimos a vivirla,
acá están las raíces enterradas
y una planta que resiste bien erguida.
La tierra ha sido buena y fértil,
y el árbol enraizó enseguida,
los vientos lo embistieron brutalmente
mas nunca lograron su abatida.
Riamos entonces mi querida amiga,
no todo ha sido entrada y despedida.
Comencemos recogiendo de estos frutos
que nos regala el árbol de la vida.
Marta Díaz Petenatti
29-11-2009
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Poesía Contemporánea
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